3.10.07

La Vida Aventurera.-
Enfrenté al demonio otra vez. ¿Adivinen?.” VINI VIDI VICI”
Gracias Toli por tus nobles palabras, se ve que te agrada la buena prosa.
Gané otra vez, jugué unas cuatro horas y conseguí lo mismo que obtengo en una semana de mi apestoso trabajo, pero jugué mal y nervioso, aunque menos que mi primera vez.
Esta vez tuve que compartir la mesa con otros sujetos, en ciertas manos, algunos extranjeros, (desconfío de esos individuos). Tengo dificultades para sujetar mi mente y llevar mi ansiedad a niveles manejables. Hice lo que pude. Me retiré ganando, pude haber seguido amontonando pilas de fichas, sin embargo la tensión, y el asfixiante humo de cigarro hicieron estragos en mí. Abandoné la racha ganadora, jugué pésimo, conté muy mal. A pesar de todo noté que los talladores más veloces no lograban confundirme.
Tuve que interrumpir varias veces mi juego con el pretexto de ir por un refresco o al baño, para lograr serenarme. Lo conseguí a duras penas, recuerden que no juego por diversión sino por necesidad contraviniendo la regla número uno de mis venerados maestros a saber: “El que juega por necesidad pierde por obligación”.
Bien ahora debo descontar los gastos del viático, los nuevos y “oficiales” mazos del casino que compré para practicar y alguna que otra estupidez y al final la ganancia se vuelve humo de casino.
Gracias David por tu convalidación, que yo no esperaba de tu parte, no pierdas nunca la facultad de tener grandes sueños aunque pierdas de vez en cuando…