30.4.08




Foto1: Lindos pastos andinos crecen en el terreno donde alguna vez construiremos nuestra ruca.
Foto2: ¿un cactus loco?... ¡no sean giles, es la nuca del Goldo cuando vino a San Peter!


Bien Chalfones... estamos de vuelta.

Parto esta nueva serie de entregas saludando en primer lugar a nuestro hermano Robinson que, desde Brasil, es un fiel lector de estas páginas... ¡Un abrazo fraterno para ti hermano, en el día de tu cumpleaños!

Recuerdo cierta vez que, fumando uno de mis tabacos preferidos -dígase un "My mixture 965" de Dunhill- se me vino a la cabeza una imagen intensa como un cabezazo de toro, a tal punto que me dormí con el impacto. Se trataba de una sensación antigua y olvidada: el rocío en la maleza brillando al amanecer mojando mi cara y mis manos. La sensación era muy nítida y cuando desperté reconstruí el recuerdo completo, un cuento simple y grato. Cuando íbamos de vacaciones a Putaendo , lo primero que hacíamos era despertar al día siguiente, lo más temprano posible, abrir la puerta e ir a jugar al patio. La sensación traída por el aroma intenso del tabaco, corresponde a ese momento de encuentro con la naturaleza necesitada, salvaje y descuidada en la que había que abrirse paso. Es un recuerdo de gran felicidad que compensaba con justicia las incomodidades sufridas por la noche anterior. Antes de ir al grano, vale decir que el aroma que despertó esa sensación era idéntico al que se sentía al cruzar la puerta que daba al terreno y que era una mezcla de humedad, hollín viejo y campo.
El grano es este: no sólo yo tengo recuerdos gratos (y otros cuantos no tanto) de Putaendo y por lo mismo, mal puedo representar la justa valoración que se pueda hacer de esa propiedad.
Sin embargo, nuestro hermano David ha presentado una buena propuesta y ésta ha sido cuestionada por uno de nosotros sin ofrecer ninguna alternativa que solucione el problema que significa la situación de descuido en que se encuentra la casita. Claro está que todos tenemos afecto por ese lugar pero, nadie ha hecho nada por mantenerlo y arreglarlo. Me gustaría saber qué propone el que se opone (el verso es a propósito), pero antes quiero exponer mi propio punto de vista a este honorable consejo Chalfón.
Hermanos, antes de que decidiéramos con mi mujer emprender este cambio de rumbo, arreglar Putaendo estaba en el borrador de mis proyectos, ahora no me es posible pues lo que está en mi borrador actual es la construcción de mi ruca en San Pedro de Atacama. Yo ya estoy viejo y la vida no me permitirá hacer nada más. Mi casa futura también será para ustedes, para que puedan venir a conocer este paraíso, sueño con poder recibirlos y que la Golda pueda venir a pasarse un mes entero si así lo quiere. De la misma manera, a mí no me importa a nombre de quién esté puesta la propiedad de Putaendo. Mi confianza con David es total y estaré feliz de que sea él quien se quede con la casa pues es quién más tiene posibilidades de mantenerla. Tampoco tendré hijos y por lo mismo, me gusta la idea de que sea la Antonia quién la heredará mañana. David sabrá enseñarle a amar ese lugar tan especial para todos nosotros. Me imagino a todos los sobrinos compartiendo unas vacaciones tan estimulantes como las vividas por nosotros, en una casita de verano donde se pueda realmente pasar una buena temporada.
Tampoco puedo pensar en Putaendo como una "inversión" si nunca he puesto una miserable chaucha por la casa, ni menos rasguñarle una tajada, si necesito dinero.... prefiero trabajar. No se me pasaría jamás por la mente, venderle "mi parte" a David ni a especular acerca de su valor comercial, me daría vergüenza. El papá tuvo una vida muy difícil sacando adelante a cinco hijos y nunca se le hubiese ocurrido vender la casa al primer obstáculo de la vida pues, él adoraba Putaendo, tanto y más que nosotros mismos.
Por lo que adoro Putaendo y por mis limitaciones para poder arreglarlo y gozarlo, lo mejor que puedo hacer es facilitarle las cosas al Goldo. El requerimiento del Goldo (de hacerse de las partes de cada cual) para mí es incuestionable pues no puedo ser copropietario de algo donde no estoy poniendo recursos. Mirar con suspicacia ese trámite, evidencia no sólo una gran falta de generosidad con la familia sino una una tremenda falta de experiencia en emprender proyectos en la vida.
David no sólo ha propuesto hacerse cargo de Putaendo, también ha preguntado si alguien tiene alguna mejor idea para solucionar lo que, en este momento, es un gran problema.
El que se opone, ¿se hará cargo de pagar las multas municipales que, de seguir así las cosas, lo más probable es que sean cursadas?...
E l que se opone, ¿alguna vez se ha preocupado de pagar siquiera la cuenta del agua cortada?...
El que se opone, ¿estará dispuesto a pagar la indemnización si se cae un muro y aplasta un niño?...
El que se opone, ¿ha preguntado por lo menos si se ha realizado la posesión efectiva de la propiedad y cuánto cuesta?...
El que se opone, ¿sabe que si no se tramita lo anterior NADIE TIENE PARTE ALGUNA DE LA HERENCIA QUE CREE QUE LE CORRESPONDE?... ah?
Bueno brothas, este es mi punto de vista. David ha planteado un problema bien serio, por favor, por lo menos respondamos a la altura de la oferta del Goldo.
Basta de hacerse el leso; bien sé que todos los Chalfones leen el Blog, así es que si alguien se opone a la propuesta de David, este es el lugar para que exponga su punto de vista y que haga una contraoferta que apunte a una solución real. David puede hacerlo y mi disposición es a facilitar su iniciativa en vez de ponerle trabas a su empuje. Como reza el antiguo refrán:
"VIVE Y DEJA VIVIR"